El mobiliario también es una parte importante en este proyecto. Siendo congruentes con la filosofía constructiva de esta casa, no podía ser de otra forma que los muebles fueran recuperados, muebles con historia previa, muebles con alma.
De manera que hemos arrancado una búsqueda, casi enfermiza, de muebles que den vida a esta casa tan especial. Recorremos mercadillos, almonedas, páginas web, chatarreros, anticuarios… en busca de esa pieza que encaje en estética, precio y funcionalidad. Este mundo es apasionante y los que en algún momento hayan buceado en mercadillos sabrán de lo que hablo: flechazo, evaluación de la pieza, imaginación al poder y fase final de regateo. Y un tanto incierto, a veces no sabes si lo que estás comprando podrá ser recuperado o quedará hecho un churro, si el uso que has pensado para esa pieza será el correcto o si estás pagando demasiado por ella.
Tenemos ya una buena cantidad de piezas alguna de las cuales todavía tiene que pasar por quirófano: antigua puerta de roble que pensamos usar como cabecero de cama, lavabo de forja, lámparas antiguas de latón, un antiguo escritorio art-decó de madera de roble , mesilla líneas rectas…
También hemos comprado piezas ya recuperadas: sillas de piel diseño italiano años 70, mesa de café danesa años 60, lámpara de arco, lámparas industriales… El tema de las lámparas merece un apartado especial ya que, a pesar que el soporte sólo necesita de limpieza, sí se van a cambiar los mecanismos para hacer uso de luces de bajo consumo.
Aquí os dejamos nuestras aventuras:
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