La aplicación de un estándar es la mayor exigencia a la que se puede someter a un edificio.
Transciende el concepto de, por poner ejemplo actual, del certificado de eficiencia energética que conocemos, ya que éste no avanza más allá del campo teórico, que será más o menos ajustado a la realidad.
La exigencia de un estándar se aplicará al producto terminado, es decir, al edificio.
Si queremos construir bajo el estándar “CASA PASIVA” deberemos construir de una determinada manera y proceder a realizar ensayos al edificio que acrediten que el proceso se ha terminado convenientemente:
Un edificio pasivo tiene 5 claves en su concepción clásica:
- AISLAMIENTO
- VENTANAS DE ALTA CALIDAD
- HERMETICIDAD DE LA ENVOLVENTE
- VENTILACIÓN
- CONTROL DE PUENTES TÉRMICOS
Yo añadiría uno más, por olvidada, el diseño bioclimático, y concretando para nuestro clima, aprovechamiento de la Energía solar.
Digo lo anterior porque el estándar es independiente del clima, se puede formular en Noruega y en México.
De manera esquemática, para que un edificio se certifique debe acreditar el cumplimiento de:
· CRITERIOS DIRECTOS PARA LA CERTIFICACION
- DEMANDA DE CALEFACCIÓN 15 KW/m2año.
- DEMANDA DE REFRIGERACION 15 Kw/m2año (no debería suponer ningún problema con medidas pasivas dejar a cero este apartado)
- CONSUMO ENERGIA PRIMARIA inferior a 120kwh/m2año
- HERMETICIDAD. Se deberá obtener un resultado inferior a 0,6r/h con una diferencia de presión de 50 Pa
· CRITERIOS INDIRECTOS PARA LA CERTIFICACION
- La Temperatura interior en verano no estará por encima de 25ºC durante el 10% del tiempo de uso
- Criterio de Higiene, se deberá limitar la aparición de mohos y condensaciones en paredes y vidrios respectivamente
- Criterio de confort, por el cual la diferencia entre la temperatura operativa interior y cualquier superficie no será superior a 4ºC. En concreto lo anterior se traduce de manera simplificada a que la Tª de la carpintería, elemento más débil de la envolvente, sea superior a 17ªC. Esto último es una simplificación de lo indicado en la norma UNE EN ISO 7730.
- La velocidad del aire en invierno no puede superar el valor de 0,1 m/s, debiendo procurar para conseguirlo condiciones de ventilación bajos. En verano se admiten, y conviene, velocidades de aire más alta, conseguida aumentando los caudales de ventilación, para proporcionar el confort de los ocupantes.
En Logroño, a 27 de Noviembre de 2014
Arquitecto